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colectivo RANT

Cómo conseguir que la noviolencia funcione (RANT Collective)

Cómo conseguir que la noviolencia funcione (RANT Collective)

LOGRANDO QUE LA NOVIOLENCIA FUNCIONE

Un enfoque ecológico de la violencia la considera como una serie de relaciones que yace bajo todos los sistemas de dominación y control. Tales sistemas tienen estas características:

- Concentración de los recursos y resultados del trabajo para beneficiar a unos pocos.

- Proceso vertical de toma de decisiones: jefes que dan órdenes y dictan directivas que los demás deben obedecer.

La violencia le da una base a estos sistemas, y es:

- La capacidad de infligir dolor, daño físico o la muerte.

- La capacidad de castigar restringiendo la libertad y coartando las opciones.

- La capacidad de negar recursos o retribuciones vitales.

- La capacidad de infligir daños emocionales y psicológicos, y de avergonzar y humillar.

Los sistemas de dominación -sin importar lo poderosos que parezcan- son inestables. En lo inherente no se pueden sostener, porque todo sistema u organismo sostenible debe estar basado en flujos de energía y recursos equilibrados y cíclicos.

El sistema se mantiene por medio de:

- El uso real de fuerza y violencia: sin embargo, usar la fuerza es costoso. Ningún sistema de dominación puede permitirse el uso de la fuerza para controlar todos los aspectos de su funcionamiento.

- La voluntad de infligir violencia por parte de los que están en el poder: ningún revolver se dispara solo; una mano humana tira del gatillo, una mente humana elige hacer tal cosa.

- Miedo: el sistema no sólo se mantiene porque ejerce la fuerza, sino también porque tenemos miedo de su capacidad de usarla.

- Esperanza: no aceptamos las pautas del sistema y cumplimos con sus exigencias porque obtengamos beneficios con ello, sino porque tenemos la esperanza de que así sea. Ganar la lotería, convertirnos en directores de una empresa puntocom, o en estrellas de la TV... Este tipo de esperanzas nos mantienen presos en el sistema.

- Límites a la imaginación: se nos hace creer que la única opción que tenemos es obedecer; nuestros pensamientos quedan restringidos a las categorías de ellos.

Una estrategia de acción directa noviolenta procura desestabilizar los sistemas de control socavando los mecanismos que los mantienen:

- Imaginación radical: negarse a aceptar la imagen del mundo que tienen los dominadores. Pensar por fuera de lo conocido. Animarse a soñar lo que nunca fue antes, pensar lo impensable, y luego crearlo.

- Esperanza: reemplazar la esperanza falsa que nos ofrece el sistema con una visión de un mundo libre, justo y abundante. Encarnar tal visión en la manera en que nos organizamos, nos tratamos unos a otros, en los símbolos que elegimos y en las acciones que encaramos. Organizar las técnicas, medios y recursos para hacer que esa visión sea algo real, y convertirla en algo tan deseable, tan inspirador, tan sexy que las pálidas esperanzas que ofrece el sistema no tengan punto de comparación.

Cuando la gente pierde la esperanza de poder mejorar su situación, deja de sentirse identificada con el status quo y puede ser impulsada a combatirlo. Cuando el sistema va demasiado lejos siembra las semillas de su propia destrucción.

- Valor: cuanto más podamos actuar sin miedo, menos va a poder controlarnos el sistema. El valor se puede hallar en la fe individual: esto no tiene que ser necesariamente un dios o una tradición religiosa, sino las fe en las capacidades humanas para el cambio, o en la infinita creatividad de la naturaleza. Asimismo, hay muchas técnicas psicológicas y de disciplina personal que pueden ayudarnos a controlar el miedo.

- Elecciones conscientes y responsabilidad: saber que en toda situación contamos con alternativas. Estar dispuestos a aceptar las consecuencias de esas elecciones.

- Solidaridad: al apoyarnos mutuamente en acciones y situaciones de tensión, al actuar en conjunto para proteger a los más vulnerables del grupo, al enfrentar la violencia potencial del sistema en forma comunitaria en vez de solos, estamos venciendo al miedo.

- Aumento de los costos: cuando dejamos de obedecer a causa del miedo, obligamos al sistema a que realmente haga cumplir sus normas. Esto es costoso en términos monetarios, materiales, y en el socavamiento del apoyo público. Forzamos al sistema a que revele la violencia oculta que lo sostiene.

- Socavamiento de la obediencia: la policía, el ejército, los guardianes de las cárceles no suelen pertenecer a la clase que recibe los beneficios del actual sistema político y económico. Cuando su voluntad de trabajar como ejecutantes se destruye, el sistema se cae.

Para lograr esto y sobrevivir tenemos que restringir la violencia potencial del sistema, el cual tiene el potencial de simplemente eliminar a cualquiera que se le oponga. La violencia absoluta del sistema puede frenarse por medio de una red sutil de fuerzas individuales y sociales. Cuanto más entendamos la forma en que funcionan estas fuerzas para ajustar o aflojar esa red, mayor capacidad de maniobra vamos a tener para llevar a cabo nuestras acciones. Como táctica, la noviolencia es a veces recibe críticas porque implica un autosacrificio, porque renuncia al derecho de autodefensa contra el estado. Pero todas las formas de lucha política exigen algo de sacrificio. La noviolencia estratégica, bien entendida, puede ser nuestra arma de autodefensa más poderosa.

La violencia se desencadena de las siguientes maneras:

- Deshumanización: ver al oponente como una categoría en vez de un ser humano completo. Así es como el racismo, sexismo, homofobia, clasismo, etc., mantienen sistemas de dominación. La gente de color, los punks, los anarquistas con rastas, la gente manifiestamente pobre, todos los que se ajustan a un estereotipo de prejuicio son los que enfrentan mayor riesgo físico y legal durante una acción.

- Percepción de una amenaza: cuando sentimos que estamos siendo atacados, es más probable que golpeemos primero. Una estrategia global utilizada para contrarrestar nuestro movimiento es ser presentados como terroristas amenazantes, y a la policía como los “salvadores” de la gente.

- Drogas o alcohol, que hacen perder las inhibiciones.

- Falta de testigos.

- Falta de repercusiones potenciales.

- Aprobación por parte de las autoridades.

- Aprobación por parte de figuras de respeto: maestros, líderes de la iglesia, etc.

- Presión del grupo: un hombre que nunca molestaría a una mujer estando solo puede ser presionado a que participe en una violación grupal. Una vez que la conciencia de un grupo ve que la brutalidad o la atrocidad es algo aceptable, a cada uno de los individuos le resulta más fácil participar y más difícil resistirse.

- Percepción de legitimidad por parte del público.

La violencia se frena a través de:

- Empatía humana y renuencia a matar o hacer daño (y sí, esto se aplica hasta a la policía, aunque obviamente no de forma universal. Sin embargo, muchos estudios demostraron que incluso en tiempos de guerra el soldado común debe ser entrenado específicamente para superar las inhibiciones que tiene contra el acto de matar).

- Miedo a las repercusiones personales, políticas y legales.

- Visibilidad y presencia de testigos y/o los medios de comunicación. A menudo vemos a la policía reprimiendo en las calles durante las acciones, y luego maltratando e intimidando a los prisioneros en la cárcel.

- Opinión pública y temor a la censura.

- La ley, y las estructuras de responsabilidad que se encuentran en el mismo sistema.

Una campaña de acción directa no violenta comienza su autodefensa mucho antes de salir a la calle, buscando ajustar esa red de control por medio de todas o algunas de las siguientes tácticas:

- Difundir y educar para que el público entienda los objetivos y tácticas de nuestra acción, y contrarrestar la deshumanización.

- Construir alianzas y coaliciones con grupos que pueden aumentar la presión pública y las potenciales repercusiones políticas para las autoridades.

- Hacer que los funcionarios públicos se hagan responsables por actos violentos pasados.

- Planear para que haya solidaridad en el grupo y preparar estrategias para proteger a los integrantes de mayor riesgo.

- Aprobar leyes que limiten la violencia de las autoridades; oponerse a las que la permiten.

En el momento de la confrontación, la autodefensa no violenta significa:

- Saber qué intención tiene nuestra acción: ¿parar literalmente una reunión? ¿crear alianzas? ¿llevar la atención hacia un tema? Lo que elijamos específicamente va a depender de nuestras intenciones.

- Transmitir esa intención al grupo tan claramente como podamos, así todos entienden las razones que yacen detrás de las opciones que elijamos.

- Oponerse al poder de la violencia con el poder de nuestra imaginación radical.

- Recordar que todo acto que hagamos es una opción, y que en toda situación podemos elegir.

- Buscar desarticular la deshumanización, mas no deshumanizando a nuestros oponentes, ya que cuando lo hacemos simplemente estamos reforzando la estructura mental y los patrones de energía que favorecen la violencia.

- Mantener nosotros nuestra propia humanidad guardando la calma, estando centrados y no dejándonos vencer por el miedo.

- Actuar de manera inesperada, no bailando al son de la violencia y la intimidación, sino escribiendo nuestros propios pasos y nuestra música.

- Traer arte, música, tambores, semillas, máscaras, marionetas y magia a la confrontación para personificar nuestra visión y esperanza.

- Tratar de ampliar también la conciencia de nuestros oponentes haciéndoles entender que ellos también están eligiendo, que la conducta de ellos no es predeterminada.

- Usar el humor y la sorpresa.

- Tener conciencia de lo que puede aumentar y disminuir la tensión en una situación, y elegir conscientemente qué hacer.

- Trabajar para fortalecer nuestra solidaridad y apoyo grupal.

- Preguntarnos lo siguiente antes de adoptar una acción extrema:

  • ¿Favorece esto a nuestra intención?
  • ¿Qué base tenemos para llevar esta acción a cabo? ¿qué soporte nos arriesgamos a perder? ¿Por qué vale la pena arriesgar el apoyo con esta acción?
  • ¿Estamos de acuerdo con esta acción? Si no, ¿qué consecuencias va a tener en para solidaridad de nuestra comunidad?
  • Esta acción ¿va a aflojar la red de control? ¿Podemos permitirnos esto en este momento? ¿Quiénes son los que corren más riesgos, y -si seguimos adelante- están ellos dispuestos a aceptarlos?
  • Esta acción ¿encarna nuestra esperanza y visión?
  • ¿Conozco y confío en la persona que me impulsa a hacer esta acción?
  • Esta acción ¿personifica el mundo por el cual estamos luchando?

RANT collective:
www.rantcollective.net/

  • 18 de abril de 2005 21:14, por Pablo

    A mí este artículo me parece muy interesante, sobre todo en su primera parte en la que confronta las raíces de la violencia ejercida por el poder, con las referencias ideológicas y de valores que la sustentan y las que pueden combatirla.

    Está claro que es una especie de guión o esquema, pero los contenidos son de gran profundidad, y uno se queda con ganas de más desarrollo de esos puntos.

    La segunda parte me parece más etérea y creo que pretende abarcar demasiadas cosas y no muy bien relacionadas entre sí. Al final no me queda nada claro qué entienden por Noviolencia los autores del artículo. Y cuando hablan de Acción Directa Noviolenta acaban dando cuatro recetas a tener en cuenta en el momento de ponerla en práctica, pero poco más.

    En cualquier caso me parece un acierto que se haya publicado este artículo, que interesante desde luego es (aunque por el número de visitas recibidas parece que el público de la web no opina no mismo).

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