casco insumissia fusil roto
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casco insumissia fusil roto

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objetur... redes juveniles... una expresion de resistencia a la guerra...

olombo, Antioquia-Colombia, Agosto 4 y 5 de 2005.

olombo, Antioquia-Colombia, Agosto 4 y 5 de 2005.

¿Qué se necesita para formar una Red?... Vengan jóvenes con sus expectativas, sus sueños, y la formaremos al instante...

Llegamos a Yolombó en las horas de la tarde, un municipio del nordeste Antioqueño del que se cuentan historias que datan desde el año 1600. Sus habitantes renombran la historia de la Marquesa, una mujer que en el periodo de colonización era dueña de la mayoría de los predios en los que hoy están ubicados los tres corregimientos que componen el municipio, ella - bastante hermosa según cuentan- se enamoró de un Marques, - que seguramente no era el de Sade- este le prometió llevarla a conocer el mundo de los reyes y los principados, las exquisiteces de la realeza, y luego, trocha arriba, muy lejos de sus tierras, la abandono llevándose sus tesoros, y la titulación de sus bienes. Cuentan que de alguna manera, la marquesa retorno a Yolombó con un par de panelas en sus manos bastante trastornada, y fue este retorno el que constituyó el origen del mito de la Marquesa de Yolombó y las fiestas tradicionales de la panela.

A treinta minutos del casco urbano, tomamos rumbo en carretera destapada hacia la vereda el Rubí, allí nos esperaban los y las jóvenes que integran el grupo juvenil de la Acción Comunal. Los chicos en sus sillas se veían inquietos y ansiosos, con la curiosidad que le causa a cualquiera que ha vivido marginado siempre, la visita de un extraño. Con mucha calidez, doña Amparo, la presidenta de la acción comunal nos dio la bienvenida, y se mostró muy agradecida por nuestra visita. En las sillas, la juventud comenzaba a inquietarse, murmullos, risas contenidas, gestos de asombro, de repente, doña Amparo de manera sorpresiva rompe el tabú con toda la humildad y la sencillez del caso: “De pronto los muchachos se sienten un poco inquietos por el pelo del joven, pues aquí ellos nunca habían visto un pelo tan enredado, ¿Será que usted se demora mucho peinándose?” La risa fue liberada... el Víctor, con la capacidad de asombro y de encontrar lo bello de cualquier instante y de cualquier persona que le caracteriza, respondió de inmediato con soltura y entrega, atendiendo a todo eso que él es, que le caracteriza y le hace ser apreciado por cualquier persona: “Estos son Dre Lox (cabellos enredados) y al final del taller les voy a contar porque me los hice y como tengo que cuidármelos”.

Jugamos con los y las jóvenes toda la tarde, con paciencia y alegría el Víctor les animo a hacer contacto, explicándoles una y otra ves un juego de coordinación: - de esos que me es difícil realizar debido a mis serios problemas de coordinación y motricidad - “y con las manos tres, y con los pies también, saludo por aquí, abrazo por allá, damos media vuelta y volvemos a empezar”. El fruto recibido por la paciencia no se hizo esperar, risas, alegría, abrazos por aquí, apretones de mano por allá, todo fluía como en una danza, nadie quería parar.

Al final de la Tarde, en subgrupos, construimos con los y las jóvenes periódicos murales en los que plasmaban con inocentes palabras su realidad, lo que han vivido, lo que sueñan según lo que han podido explorar del mundo, en los carteles aparecían cosas como: “Despertamos a las 6:00 am para ir a la escuela, los principales problemas que tenemos es que no hay muchos implementos para estudiar, nos cuesta estudiar, pero nos agrada ir al colegio, hay mucho madresolterismo, falta más apoyo de la administración para fortalecer el trabajo de los jóvenes, al grupo juvenil le falta proponer más actividades para integrarse con la comunidad, hay deficiencia de alimentación, no hay empleo, no hay empleo, no hay empleo, no hay empleo, no hay empleo”, pero... ¿Será que preadolescentes de 12, 13 y 14 años tendrían que ir al trabajo en un país en el que según cuentan rige el estado social de derecho?, ¿acaso no es un derecho que en esta etapa de sus vidas, niños, niñas y jóvenes se dediquen solo a estudiar y a recrearse mientras los dueños del estado social de derecho les subsidian sus estudios, su alimentación, su vestimenta, su bienestar en pleno?, ¿No es esa la finalidad de una democracia?. Mentira... al venir aquí, uno se da cuenta que la realidad es otra, tan cruel y despiadada como quieran, a tal punto que una niña de la vereda el Rubí se me acerca y me dice que está preocupada por que no hay nada en que trabajar después de ir a la escuela.

Con las sonrisas de los niños, niñas y jóvenes como premio, tomamos el camino trocha abajo de regreso a Yolombó. Ferney, uno de los jóvenes líderes promotores de la Red, nos acompañó hasta el hotel, que muy amablemente financió la secretaría de desarrollo comunitario de la alcaldía. Mientras reconocíamos la habitación, Ferney nos habló un poco de las movidas del pueblo. El casco urbano es controlado por paramilitares, todos en el pueblo saben quienes son, pero de eso nadie habla, es algo así como una realidad muda, o que enmudece a la gente por temor, o simplemente por indiferencia. Son los dueños del hotel que queda justo en frente del nuestro, cuentan que han visto en más de una ocasión, que en la madrugada sacan personas que han matado dentro del lugar envueltas en mantas, se las llevan en carro hasta las afueras del pueblo, o las arrojan a las quebradas. También son dueños de una de las discotecas, allí todos los fines de semana hacen shows con mujeres que traen desde Medellín, desde luego, poseen propiedades, ganado, y reciben ganancias de muchos de los locales comerciales que hay dentro del casco urbano.

Ferney es un joven amable y entusiasta, le a puesto empeño a la labor de promoción de la red de jóvenes, por lo cual goza de la admiración, el respeto y el apoyo de la administración municipal, apoyo que se ve encarnado en Jorge, el promotor de desarrollo comunitario de la alcaldía, que le dijo al alcalde que tres extranjeros irían a conocer al pueblo, para poder asegurar el apoyo de la administración. Ferney vive en Yolombó en una casa de familia, sus padres y hermanos viven en una vereda, como a dos horas del casco urbano, tienen una granja en la que cosechan café, y otros productos de consumo diario, el se va a la granja de su familia en la temporada de vacaciones escolares.

En la noche caminamos un poco por el pueblo, era día de feria, los hacendados salen a la plaza a presumir con sus caballos y a llenar las calles de estiércol, todas las cantinas abiertas y llenas de borrachos, afuera la gente disfrutando de los frigoríficos y el atrio de la Catedral, la gente baila, ríe, goza, motos, carros, algarabía, un apagón momentáneo en todo el pueblo, y a descansar.

Al día siguiente, caminando entre dos y tres horas desde sus veredas, jóvenes de distintas veredas de Yolombó llegaron a la casa de la cultura del casco urbano, donde nos dimos cita y nos hicimos presentes para hablar de la Red de Yolombó, y por qué esta es una expresión viva de resistencia. Con juegos cooperativos, teatro de los oprimidos, juegos de comunicación y elaboraciones de periódicos murales motivamos la discusión. 26 jóvenes de cuatro veredas y del casco urbano hablaron de su idea de red. El proceso apenas comienza, se reúnen una vez al mes para plantear objetivos, pensar en los recursos, ha sido fundamental la vinculación de grupos juveniles de las veredas a este proceso, pues es realmente lo que lo fundamenta como una dinámica de Red. El solo hecho de encontrar espacios de encuentro y de organización de los y las jóvenes en una zona de paramilitarización y militarización social, ya les convierte en un proceso de resistencia, aunque esos lemas alusivos a la objeción de conciencia y el antimilitarismo todavía no peguen mucho en su imaginario. En el taller se pudieron discutir asuntos como la autonomía de la Red, ¿Hasta donde decide la administración municipal con su proyecto de clubes juveniles y hasta donde los y las jóvenes de los grupos?, ¿Quien le pone las metas y la visión a la Red?, ¿Quiénes son los dolientes del proceso?, la conclusión fue bastante satisfactoria: Esta es una Red de Jóvenes, para jóvenes y con jóvenes, que puede contar con amparos de la institucionalidad, pero decide autónomamente y construye los parámetros de actuación según las realidades de los y las jóvenes.

Aunque hay que hablarles un poco fuerte, los y las jóvenes comprenden que ese asunto del poder, de la toma de decisiones, que por mucho tiempo nos ha sido relegado, cobra sentido cuando se sustenta en propuestas en las que las ideas de todos y todas tienen valor, procesos en los que los aportes, simbólicos, palpables, individuales y colectivos forman lazos y constituyen las redes, así funciona este proceso en Yolombó, con jóvenes que la caminan tres horas para ir a la reunión, a veces sin tener ni pa’ tomarse una gaseosa en el pueblo, moviendo las dinámicas en las veredas, animando a otros jóvenes a participar y a decir, lo que halla que decir.

Agradecimientos especiales a los y las jóvenes que participaron en este taller y nos enseñaron bastante al Victor y a Mí.

Agradecimientos por el apoyo y el acompañamiento constante a ferney (Líder de la red de Jóvenes), Jorge (El promotor de la oficina de desarrollo comunitario de la Alcaldía), Eliana (La actual marquesa de Yolombó), y Marínela por el recorrido por la plaza y la alimentación.

POR:

LEONARDO JIMENEZ

RED JUVENIL DE MEDELLIN

  • 29 de julio de 2006 21:14, por Jipi

    es vacano pero muy largo viejo

    Ver en línea : Hello Motor

  • 16 de diciembre de 2006 18:31

    Muy bueno este reporte de mi tierra yo soy de alli .
    Soy uno de esos jovenes q tuvo q dejar aquel bello lugar aunq todavia tengo amis padres alli y espero retornar a este bonito paraje alex

    • 30 de julio de 2007 21:02, por silvester

      mi familia tambien es de alli podemos chatiar mañana a las 5.00 silvesterjaramillo hotmail.com

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