Tal vez movido todavía por su intento de hacerse perdonar la salida de las topas de Irak, el gobierno de Zapatero no se pronuncia públicamente sobre los brutales métodos de guerra de su aliado estadounidense en Afganistán, que se diferencian bien poco de los que pone en práctica diariamente el «amigo americano» en tierras mesopotámicas.
¿Tampoco se pronuncia el gobierno español sobre la contradicción de pedir a otros la condena de la violencia en interior de sus fronteras, mientras mantiene esta actitud fuera de ellas? ¿Es la del Partido Socialista Obrero Español una posición ética respecto al uso de la violencia, como se suele afirmar, o estamos hablando de otra cosa? ¿Qué excusas son más válidas tras las muertes de civiles, la de los militares americanos o las de ETA tras el atentado de Barajas? ¿Dónde quedan aquellas bonitas palabras de Zapatero contra la guerra y a favor de la justicia en el planeta en tiempos de las movilizaciones mundiales pacifistas? ¿Quien es cómplice de la violencia indiscriminada que sufre la población civil afgana: sólo los talibanes? ¿A qué responde realmente la presencia de tropas españolas en suelo afgano?
Un bombardeo de EE.UU. mata a siete niños al este de Afganistán
El mando estadounidense se declara «entristecido» y acusa a Al Qaeda de utilizar a las víctimas como escudos humanos
KABUL/MADRID, 18 Jun. (OTR/PRESS) -
El último bombardeo de Estados Unidos sobre territorio afgano ha vuelto a cobrarse la vida de civiles inocentes. En esta ocasión, en el distrito de Zarghun Shah, en la provincia de Pakitka -al Este del país- donde la aviación estadounidense se cebó con una mezquita y una madrassa (escuela islámica) tras recibir informaciones «creíbles» de que una «actividad vil ocurría en el lugar». El resultado fueron siete niños de entre 10 y 16 años muertos, víctimas de un conflicto de las que el mando estadounidense se siente «entristecido», pero de las que culpa a Al Qaeda, por utilizar a la población civil como escudos humanos.
Con el bombardeo de esta madrugada ya son tres las masacres civiles que el Ejército estadounidense provoca en Afganistán. A finales de abril, la aviación de EE.UU. ya provocó la muerte de 51 civiles en la provincia de Herat -al Oeste del país- en la zona que tienen asignada las tropas españolas bajo el mando de la ISAF. Tan sólo unos pocos días más tarde, a principios de mayo, otros 21 civiles perdían la vida en una operación la provincia de Helmand -al Sur. De momento, la única defensa que ha obtenido el pueblo afgano es la del presidente del país, Hamid Karzai, que calificó los hechos de «inaceptables».
En esta ocasión, la operación de barrido aéreo contaba con el respaldo de las tropas afganas, después de que las tropas estadounidenses detectaran que «actividad vil ocurría en el lugar». Según un portavoz del Ejército de EE.UU., mayor Chris Belcher, las tropas de la coalición realizaron labores de rastreo en el lugar y «no detectaron indicios de que hubiese niños» dentro de alguno de los edificios, que comprendían una mezquita y una madrassa. El bombardeo que arrasó los edificios sospechosos tuvo lugar en la madrugada del lunes y el resultado fueron al menos siete niños de entre 10 y 16 años muertos y «muchos milicianos» abatidos, informó el Ejército.
Belcher acusó a Al Qaeda de utilizar «el estatus protector de la mezquita, igual que a los ciudadanos, para protegerse a sí mismos.»Estamos entristecidos por las vidas inocentes que se han perdido como consecuencia de la cobardía de los milicianos«, señaló el militar, al tiempo que acusó a la organización terrorista internacional de no permitir que los niños abandonaran el recinto escolar.»Si hubiésemos sabido que había niños en el interior del edificio, no hubiésemos llevado a cabo el bombardeo de ninguna manera", aseguró por su parte Dean Welch, sargento de primera clase y también portavoz del Ejército estadounidense.
MEJORAR LA COORDINACIÓN
Mientras la misión humanitaria de la ONU enviaba a un equipo hasta el lugar de los hechos junto a varios miembros de la Comisión Independiente de los Derechos Humanos en Afganistán para investigar el incidente, el gobernador de Paktika, Akram Akhpelwak, aseguraba que normalmente la coordinación entre las autoridades locales y las fuerzas de EE.UU. y la OTAN es mucho mejor, pero que en esta ocasión nadie le avisó de antemano del bombardeo que iba a tener lugar en Zarghun Shah. «Nos trasladaremos al lugar de los hechos y hablaremos sobre el incidente con la gente y le pediremos perdón», proclamó Akhpelwak.
En la misma línea aseguró que las tropas afganas, las de EE.UU. y la OTAN están trabajando para «tener una mejor coordinación y para evitar este tipo de malentendidos. Pero hoy hemos tenido un malentendido y la gente estará infeliz», añadió el gobernador.
La ONU pide una tregua en Afganistán para vacunar a los niños contra la polio
18.06.07 | 13:24.
(PD/EFE).- La ONU ha pedido tres días de alto el fuego en el sur y el este de Afganistán para poder vacunar a 1,3 millones de niños contra la polio. A pesar de que el plazo comenzó el pasado domingo, ese día el país registró distintos atentados.
La campaña supone la movilización de 18.000 trabajadores que, puerta por puerta, tienen la misión de inmunizar, con apenas dos gotas por dosis, a los niños afganos de 13 provincias, según informó la organización en un comunicado recogido por la agencia IRIN.
«Hemos pedido un período de tranquilidad, sin operaciones militares, para inmunizar a todos los niños menores de cinco años», dijo un oficial de la Organización Mundial de la Salud, Tahir Pervaiz Mir.
Según la ONU, la inseguridad en el país, uno de los mayores desafíos para las cuatro campañas de inmunización llevadas a cabo hasta ahora, ha impedido el acceso a decenas de miles de niños en el sur y el este del país.
Tres países con polio
En sus tres formas más conocidas, la polio ha sido eliminada en todo el mundo salvo en Nigeria, la India, Pakistán y Afganistán. En este último país, en 1999 hubo más de 60 casos, una cantidad que descendió luego pero repuntó de nuevo en 2006 con 31 afectados.
De acuerdo con los responsables de la campaña de vacunación, que cuenta con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud y de UNICEF, la operación tendrá lugar en las áreas más golpeadas por los insurgentes y prevé erradicar la enfermedad del país en el año 2008.
Unos 150 muertos, muchos civiles, tras varios combates en el centro de Afganistán
EFE. 19.06.2007 - 09:24h
* Es el balance tras tres días enfrentamientos en la provincia de Uruzgan, en el centro del país.
* Las cifras cambian según las fuentes y, mientras que Estados Unidos da 10 civiles heridos, fuentes afganas dan 100.
* El pasado día 15 tuvo lugar un ataque suicida en la zona contra un convoy de la OTAN que causó la muerte a seis niños y un soldado.
Tres días de fuertes enfrentamientos registrados en la provincia central la Uruzgan entre fuerzas internacionales e insurgentes talibanes han causado la muerte de hasta 150 personas, entre ellas muchos civiles, según informaron a Efe varias fuentes.
El portavoz de la OTAN, John Thomas, confirmó la muerte de «50 o 60 insurgentes» en los combates, que comenzaron el domingo en el distrito de Chora y todavía continúan, al tiempo que reconoció que la organización investiga las noticias sobre un «gran número de bajas civiles».
Unos 100 civiles resultaron heridos
«Un soldado y dos policías han muerto. Solo tenemos un informe que recoge 10 civiles heridos en la operación», iniciada por la OTAN y en la que se empleó apoyo aéreo, informó a Efe el portavoz.
Los datos de Thomas contrastan, sin embargo, con los aportados sobre el terreno con un miembro del Consejo Provincial de Uruzgan, Mawlawi Amdullah, quien denunció a Efe haber visto los cadáveres de 70 insurgentes, 16 policías y 60 civiles, incluyendo mujeres y niños.
Datos contradictorios
«Unos 100 civiles resultaron heridos. La gente se vio atrapada en la lucha y en algunos sitios las bombas de la OTAN mataron a algunos civiles. La gente ha improvisado hospitales móviles», comentó Amdullah.
Un portavoz de la región, Abdul Rashid, aseguró a la misma hora disponer tan solo de datos sobre la muerte de 4 policías, 10 civiles y 60 insurgentes, entre ellos un «famoso dirigente», el mulá Motalib.
Hay una oleada de combates, atentados, ataques suicidas y bombardeos de la aviación estadounidense
Rashid cuantificó en 18 los civiles heridos en la operación, que, dijo, comenzó por iniciativa de la OTAN y el Ejército afgano.
En Uruzgán, donde el pasado día 15 tuvo lugar un ataque suicida contra un convoy de la OTAN que causó la muerte a seis niños y un soldado, se encuentran desplegadas tropas australianas y holandesas.
El distrito de Chora, en el centro del país, limita con la sureña y conflictiva región de Kandahar, uno de los feudos de los insurgentes, que han recrudecido sus actividades con la llegada del calor.
Afganistán afronta estos días una oleada de combates, atentados, ataques suicidas y bombardeos de la aviación estadounidense, como el que acabó este domingo con la vida de siete niños que se encontraban encerrados en una escuela de la provincia de Paktika (este).