FLORANTONIA SINGER
(El Nacional, 31 de marzo 2006)
Quienes transitaron ayer por la esquina de Pajaritos se sorprendieron con el
campamento de niños que tomó la entrada del edificio de la Asamblea
Nacional, para expresarse en torno a un tema que, a nadie más que a ellos,
compete: el proyecto de ley de educación.
"Quisiera preguntarle a los diputados por qué tenemos que venir a pintar
pancartas enfrente de sus oficinas, si la educación en derechos humanos es
algo reconocido mundialmente", comentó José Gregorio Parra, de 15 años de
edad, uno de los estudiantes de las cuatro escuelas que participaron en la
toma pacífica.
La actividad fue promovida por la Red de Apoyo por la Paz y la Justicia,
para exigir que la educación en derechos humanos quede establecida en el
currículo escolar. Según expresó su vocero, Pablo Fernández, la organización
no gubernamental también exige que se respete el derecho a los padres a
elegir la escuela para sus hijos, así como también que la instrucción
premilitar sea una materia opcional y no obligatoria.
"Servir a la patria no es hacer el servicio militar. Debe haber otras
opciones que no incluyan la militarización de la educación.
Si tenemos instrucción premilitar, también deberías tener premédica,
preperiodística", aseguró Fernández.
El diputado Luis Acuña, presidente de la Comisión de Educación del
Parlamento, recibió las propuestas y aseguró que se tomarán en cuenta.
Indicó que está pendiente la discusión de cómo se va a sancionar la
indisciplina de los alumnos en la escuela y la universidad. Agregó que han
adelantado reuniones con la Iglesia para aclarar el artículo de la educación
laica; así como con representantes del MED, que también tienen observaciones
a la última versión del documento.
A pesar de que se ha pospuesto la realización del foro del proyecto de ley
en el hemiciclo protocolar, Acuña señala que continúa la discusión en el
interior del país y se han distribuido 4.000 ejemplares del documento.