La rebelión de las ONG de salvamento en el mar marca una última etapa en el afianzamiento del Mediterráneo como una necrofrontera. Mientras, en la reconfiguración de la Unión Europea, nada parece augurar un cambio en las políticas migratorias.
Sarah Babiker
El jueves 4 de julio la red internacional de vigilancia en el Mediterráneo, Alarm Phone, alertaba del naufragio, el día anterior, (...)